Para nosotros algo importante la mayoría de las veces es pasar lo más desapercibidos posible el día de tu boda. Esto es porque lo que nos gusta es captar momentos naturales y diferentes que reflejen la personalidad de tus invitados, así nunca te cansarás de ver tus fotos de boda. Pero por desgracia sabemos que una cámara impone un poquito, así que cuanto menos llamemos la atención, mejores fotos tendrás.
Claro que sí, es completamente compatible una cosa con la otra. Lo único que necesitamos es que nos apartes en el horario de tu gran día un ratito para poder escaparnos a solas y haceros una sesión chula. Si quieres ver algunos ejemplos, pásate luego por nuestra galería.
Técnicamente no es necesario tener una preboda, pero si es muy recomendable. De hecho, nosotros es raro que hagamos solo la boda sin una sesión previa.
¿Por qué? Porque el 99% de los novios nunca han estado delante de una cámara y eso es un sinónimo de nervios. Por supuesto, no queremos que ese día estéis agobiados pensando que hacer con el fotógrafo. Por eso, para coger confianza con nosotros y familiarizaros con las cámaras, vemos tan importante esta sesión.
El día de la boda os acompañamos desde el inicio. Cuando comience el maquillaje de la novia para captar todos los detalles posibles hasta que estés completamente lista para salir. Ahí es cuando aprovecharemos para sacar los detalles de tu vestido, zapatos, etc…
Para esos momentos una recomendación, relájate, disfrútalos y rodéate de la gente que más aprecies. Esos momentos son únicos y no se van a repetir.
Probablemente, el momento por excelencia es cuando ves por primera vez a tu pareja que ha cuidado hasta el más mínimo detalle para estar espectacular. Te proponemos que ese momento lo vivas en la intimidad, los dos solos, o rodeados de tu gente más cercana. Quizá sea algo a lo que no estás muy acostumbrado, pero son asombrosamente bonitos los nervios que se mastican en ese momento…
Después pasamos al acto legal y a la celebración. Solo necesitamos que nos informéis con anterioridad de los horarios y lugares de los acontecimientos para que os molestemos lo menos posible en ese día.
Nos tenéis todo el día a vuestra disposición hasta aproximadamente una hora después del baile inicial, que será cuando nos retiremos.
Obviamente hacemos una selección de fotos, porque con todas las que hacemos salen algunas repetidas, otras con caras que no te gustaría ver… pero tranquilos que hay fotos de sobra. Normalmente en una boda suelen salir entre 900 y 1200 fotos, suele depender del tiempo que dure la boda y la cantidad de invitados. Todas las fotos van en alta resolución para poder imprimir sin problemas y si quieres que te las pasemos en formato pequeño para móviles o tablets, solo tienes que decírnoslo.
Las fotos las entregamos en una de nuestras cajas personalizadas y únicas. Estamos tan seguros de poder decir que nuestras cajas son únicas, básicamente porque las preparamos nosotros mismos con nuestras manitas. Consideramos que la fotografía no deja de ser un proceso sumamente artesanal, desde que te imaginas una foto hasta que la ves reflejada en papel. Por eso el packaging de este proceso no podía ser menos.
Esperamos que nuestra descripción de lo que hacemos te haya resultado útil. Pero si te surge cualquier otra pregunta no dudes en consultárnosla. Rellena el formulario de Contacto y te atenderemos lo antes posible.
Un abrazo!